Economía
Cerrejón anuncia dramática reducción de su producción de carbón. Estas son las razones
La empresa advirtió que esta decisión no impactará los compromisos sociales o ambientales vigentes que tiene la compañía.

Cerrejón, ubicada en La Guajira, es una de las minas a cielo abierto más grandes del mundo en la producción de carbón térmico. Este martes tomó una de las decisiones más complejas en su historia operativa en el país: anunció que comenzará a reducir su producción anual entre 5 a 10 millones de toneladas a partir de la fecha, con respecto a lo que tenía planificado inicialmente para 2025.
Así las cosas, se estima que la producción anual se ubique entre 11 a 16 millones de toneladas dependiendo de la evolución de las condiciones del mercado a lo largo del año. Ya la tendencia era decreciente: en 2023 produjo cerca de 22 millones de toneladas y para 2024, la cifra se ubicó en 19,1 millones.
En un pronunciamiento de su presidenta, Claudia Bejarano, señaló que se trata “de una decisión difícil, pero necesaria, para garantizar la sostenibilidad de las operaciones y la capacidad de la empresa para seguir generando ingresos para la región y el país”.

La razón principal de esta reducción se debe a los precios insostenibles del carbón térmico transportado vía marítima. “El mercado natural de carbón colombiano que se encuentra en Europa y el Mediterráneo ha reducido su demanda, provocando así una mayor venta de carbón a Asia, donde los costos de transporte marítimo son mucho más altos, lo que resulta en precios de venta bastante bajos”, dijo Bejarano.
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Sin embargo, a esta decisión se suman otros factores que han afectado la operación de la minera, propiedad de la multinacional Glencore.
Por una parte, el complejo entorno social con bloqueos permanentes, a lo que se suma ataques violentos a la infraestructura operativa. Cerrejón pasó de tener 60 bloqueos en el año 2021 a 333 bloqueos en el año 2024. Esto resultó en 135 días el año pasado en los que no pudo transportar carbón al puerto. Además, se registraron cinco ataques con explosivos a su línea férrea, en los últimos tres meses.
Las principales motivaciones detrás de estos bloqueos a Cerrejón incluyen demandas por la calidad de los servicios públicos y educación, falta de pago a contratistas de entidades como el ICBF, solicitudes de empleo y conflictos internos entre comunidades.
En un reciente pronunciamiento de Cerrejón, se afirmó que los bloqueos a la vía férrea y las carreteras generan un impacto negativo en toda La Guajira. Estas acciones impiden el suministro de bienes, restringen la movilidad de personas y empleados, afectan la llegada de insumos esenciales para nuestra operación minera e impiden el transporte de carbón hacia el puerto.

Además, los bloqueos le impiden a la empresa distribuir agua potable a 164 comunidades, una iniciativa que viene operando desde 2014.
“A nivel económico, estos bloqueos también deterioran la reputación de Colombia como proveedor confiable de carbón y afectan la capacidad de Cerrejón para cumplir con sus compromisos de exportación. Nuestros clientes tienen alternativas en otros países, por lo que la continuidad de la operación es clave para mantener la competitividad del sector. Si Cerrejón no logra producir y vender su carbón, los ingresos de la Nación y el Departamento se ven afectados, pues se disminuyen las regalías e impuestos que recibe el país y que son base para la inversión, entre otras, en las necesidades del Departamento”, aseguró en su momento la compañía.
Y agregó: “El impacto en la economía local es significativo. Una reciente encuesta de la Cámara de Comercio de La Guajira reveló que el 90% de los empresarios ha sido afectado por los bloqueos. Según su análisis económico, durante el primer semestre de 2024 las pérdidas en los sectores económicos del departamento ascendieron a $7.638 millones, reflejándose en bajas ventas, cancelación de servicios, aumento de precios, dificultades logísticas y pérdidas de productos perecederos”.
Bejarano señaló que, ante esta situación, “no nos queda otra opción que seguir adaptando nuestras operaciones de forma responsable, como siempre lo hemos hecho, lo que nos obliga a revaluar nuestros planes mineros, costos y necesidades de inversiones de capital. Quiero dejar presente que esta reducción de la producción no impactará los compromisos sociales o ambientales vigentes de Cerrejón”.
Destacó, finalmente, que el carbón seguirá siendo durante décadas un producto básico e importante para la generación de energía asequible. “Si bien Cerrejón ha implementado numerosas iniciativas para responder a las difíciles condiciones actuales del mercado, creemos que la decisión de reducir la producción contribuirá a garantizar la sostenibilidad de las operaciones y la capacidad de la empresa para seguir generando ingresos para la región y el país”, puntualizó.

Aunque en sus pronunciamientos la compañía no lo advierte, tampoco ha ayudado la posición hostil del Gobierno con el sector extractivo, que incluso el presidente Gustavo Petro ha comparado con la coca.
De hecho, en la propuesta de reforma al Código Minero, uno de los principales puntos es la prohibición a la producción de carbón térmico en el país, al tiempo que esta ha sido una de las industrias más impactadas por las reformas tributarias recientes.