Bogotá

Comandante de la Policía Metropolitana: “En Bogotá los criminales tuvieron caldo de cultivo para desarrollar actividades delictivas”

El general Giovani Cristancho, nuevo comandante de la Policía de Bogotá, habló con SEMANA sobre los retos que afrontará en la lucha contra el homicidio, los atentados y el arraigo de las organizaciones criminales venezolanas.

17 de marzo de 2025, 8:00 p. m.
Brigadier General Giovanni Cristancho
comandante de la Policía de Bogotá
Brigadier General Giovanni Cristancho, nuevo comandante de la Policía de Bogotá. | Foto: ESTEBAN VEGA LA-ROTTA / SEMANA

SEMANA: ¿Cómo lo recibió Bogotá? ¿Cuál fue esa primera mirada de la ciudad?

General Giovani Cristancho (G. C.): Lo primero es entender que la ciudadanía en este momento siente temor, pero, en los números, vamos ganando en todos los hurtos y hay una reducción importante. Por ejemplo, la reducción de hurto a entidades financieras, que está en 75 % menos; el hurto a comercio, 52 % menos; el hurto a automotores, 48 % menos. El hurto de motos bajó 40 %, el hurto de personas, 20 %, y el hurto de residencias cayó 26 %. En la extorsión también tenemos una reducción.

Brigadier General Giovanni Cristancho
comandante de la Policía de Bogotá
Brigadier general Giovanni Cristancho, comandante de la Policía de Bogotá. | Foto: ESTEBAN VEGA LA-ROTTA / SEMANA

SEMANA: Pero en el día a día eso no se percibe…

G. C.: Todos los días entran casos y el ideal es que las cifras estén en cero. También, que la ciudadanía sienta confianza, que denuncie más y que confíe en los policías. Lo que queríamos es que en sectores como San Bernardo, María Paz, El Amparo y algunas zonas de Ciudad Bolívar, no se presenten los delitos como se vienen presentando y poder tener la contención de esos lugares es clave para nosotros.

SEMANA: El nuevo director fue comandante de la Metropolitana. ¿Cuál fue la instrucción que le dio para la capital del país?

G. C.: La línea de acción es transversal a la del general Triana y es atacar a las organizaciones multicrimen y de delincuencia organizada. Bajo ese parámetro yo voy a generar toda la estrategia para Bogotá y vamos a atacar a quienes vienen delinquiendo. Yo soy bogotano y encontré una ciudad con unos grupos delincuenciales de extranjeros que vienen generando todos los delitos como el hurto, el homicidio, la venta de estupefacientes y la extorsión, y necesitamos, primero, atacar todos esos grupos como prioridad.

SEMANA: ¿Cuál es la estrategia, entonces?

G. C.: Los lugares ya los tenemos identificados y los estamos priorizando y focalizando. También estamos buscando cambiarles el estatus a estos grupos para que sean enfrentados como grupos delincuenciales organizados, lo que implica que tengamos investigaciones diferenciales y fiscales diferenciales. Ya estamos trabajando en eso para subirlos de categoría y poder generar realmente unas capacidades investigativas adicionales para enfrentar estos grupos.

SEMANA: ¿Está trabajando solo o quién lo acompaña en esa labor?

G. C.: Ya nos hemos reunido con diferentes especialidades e, incluso, hicimos el organigrama de quienes son los cabecillas del Tren de Aragua en cada barrio y quién es el cabecilla principal de esa organización aquí en Bogotá.

Incautación de armas y estupefacientes
Intervención de la Policía Nacional en el barrio San Bernardo, en el centro de Bogotá. General Giovanni Cristancho, director de la Mebog. | Foto: ESTEBAN VEGA LA-ROTTA / SEMANA

SEMANA: Pero no solo es el Tren de Aragua…

G. C.: También tenemos el problema de Satanás que, en su momento, tuve la oportunidad de capturarlo cuando era director del Gaula y lo trajimos de Ecuador. Ya conocemos su estructura y vamos por los que quedan de ellos que están dinamizando el crimen. También tenemos a Los Maracuchos, Los Venecos, algunas facciones en Suba de Los Mesa y un grupo delincuencial en Kennedy que se autodenomina Los Paisas. La línea investigativa va a ser muy importante y vamos a articularnos con la Fiscalía para lograr capturas.

SEMANA: ¿Cuál es la particularidad que tienen los grupos venezolanos que se han incrustado tanto en Bogotá y no en otras ciudades?

G. C.: Yo, como director del Gaula y como un hombre de operaciones especiales que recorrí toda Colombia y que vengo del Valle, donde conocí todas las bandas delincuenciales, creo y pienso que lo que sucedió en Bogotá fue que estas estructuras se dieron cuenta de que aquí era más fácil porque no había grupos delincuenciales fuertes y ahí fue que comenzaron a generar homicidios en ciertas zonas para poder desplazar a los cabecillas y por eso se consolidaron.

SEMANA: Pero, ¿por qué Bogotá…?

G. C.: Porque no había grupos fuertes. Bogotá nunca ha tenido grupos delincuenciales organizados. Ellos no iban a desplazar los combos a Medellín, no van a ir a Cali a desplazar oficinas de cobro ni a Buenaventura a pelear con los Chitas o Espartanos. En Tuluá no se van a meter con la Inmaculada o con los Flacos. En Barranquilla no se van a meter con los Costeños o con la Heroica en Cartagena. Lamentablemente, en Bogotá tuvieron caldo de cultivo para desarrollar esas actividades delictivas.

SEMANA: Pero aquí también tenemos bandas como los Paisas, Boyacos, Costeños, ¿por qué es diferente la pelea aquí?

G. C.: Pues es que ellos se pueden denominar como esos grupos, pero en realidad son personas que han migrado de esas organizaciones y que no tienen el mismo nivel de violencia que en sus lugares de asiento. Ahora, tampoco tienen el mismo nivel de violencia que los grupos extranjeros. Por ejemplo, desde 2019 con los embolsados, ese nivel de violencia no se tenía aquí en Bogotá. Pero también tiene mucho que ver la forma en la que ha cambiado la ciudad y cómo esa misma migración ha hecho que la cultura en Bogotá ya sea diferente y así mismo las características delictivas.

Brigadier General Giovanni Cristancho
comandante de la Policía de Bogotá
Brigadier general Giovanni Cristancho, comandante de la Policía de Bogotá. | Foto: ESTEBAN VEGA LA-ROTTA / SEMANA

SEMANA: Usted dice que en Bogotá pasan cosas que en otras ciudades no. ¿Faltó algo de parte de las autoridades para prevenir el problema que sería el Tren de Aragua?

G. C.: Yo creo que en toda Colombia ha faltado que la migración se controle, así como las personas desplazadas; tiene que haber una mejor caracterización. Al final, la Policía es la que termina en cada barrio atendiendo las necesidades y la multiculturalidad que llega a la ciudad.

SEMANA: ¿Tiene pensado actualizar el inventario criminal?

G. C.: Sí, lo estamos actualizando en este momento y estamos caracterizando cada una de las zonas y los grupos que delinquen porque no todos se dedican a lo mismo. Pero el foco de esto es poder tener insumos para poder atacar a los grupos multicrimen en los cuatro principales delitos: extorsión, homicidio, hurto y tráfico de estupefacientes.

SEMANA: ¿Cuántos grupos delictivos hay en este momento operando en Bogotá?

G. C: A mí me presentaron un listado de 87 que están caracterizados. Pero ahí hay que ver cómo lo caracterizan y qué elementos tienen para decir que es un grupo delincuencial, porque es que en un barrio se pueden reunir tres personas y eso ya es un grupo delincuencial. En Colombia tenemos grupos armados organizados, grupos delincuenciales organizados y grupos delincuenciales comunes organizados; las bandas no están dentro de la clasificación.

SEMANA: Bogotá cerró el 2024 con incrementos del 42 % en homicidios, cifras que no se veían desde hace 8 años…

G. C.: Estamos trabajando con microterritorios que ya están caracterizados y donde se concentran los homicidios, pero cada día hay que analizar y verificar cómo están operando, si es un homicidio por intolerancia o por ajustes entre grupos que se disputan el control o si es un ajuste de cuentas interno. Tenemos unos planes con grupos motorizados que dejó el general Gualdrón y que vamos a reforzar y los microterritorios que nos han arrojado los análisis criminales y con los que se pueden determinar los días, las horas y los momentos en los que más ocurren los fenómenos.

Bajo la comandancia del general Cristancho, la Policía Metropolitana de Bogotá se tomó el barrio San Bernardo luego de los últimos atentados. | Foto: ESTEBAN VEGA LA-ROTTA-SEMANA

SEMANA: ¿No cree usted que está desgastado ya el argumento de que los homicidios son por ajuste de cuentas? Porque, al final, todos los muertos cuentan…

G. C.: La vida es lo más importante y el bien más preciado que tenemos. Para nosotros, créame, es muy importante, sin importar quién sea y si tenga o no tenga antecedentes, que no ocurra. Lo más importante siempre después de un homicidio es capturar, porque lo más importante no es el homicidio en sí, sino la réplica que viene después de parte de otro grupo. Sí o sí hay que sacar de circulación a esos grupos delincuenciales.

SEMANA: ¿Cómo están las fronteras de Bogotá? ¿Estamos realmente en un riesgo inminente de la llegada de grupos armados de orden nacional?

G. C.: Bogotá siempre ha estado en zona de riesgo. Si miramos antecedentes de hace unos años, el Sumapaz fue una de las joyas que siempre quisieron las Farc y no pudieron; La Calera y Sibaté, también. Secuestraban gente y la sacaban por el Sumapaz hacia los Llanos. En este momento han venido generando acciones de propaganda y nos hemos reunido cada 8 días con las inteligencias para ver qué información se tiene. Seguramente estos grupos sí van a querer entrar, pero ahí es donde nos toca tener una prevención adicional, tener más inteligencia y más investigación criminal, porque la amenaza para Bogotá siempre va a estar latente y ya es una tarea nuestra. Hoy no tenemos una línea investigativa que nos diga sí, ya están aquí, en tantos barrios o en tantas zonas.

Brigadier General Giovanni Cristancho
comandante de la Policía de Bogotá
Brigadier general Giovanni Cristancho, comandante de la Policía de Bogotá. | Foto: ESTEBAN VEGA LA-ROTTA / SEMANA

SEMANA: ¿Qué está pasando con las granadas de fragmentación y las armas de largo alcance que están usando las bandas criminales?

G. C.: Los grupos siempre van a querer tener armas. Si miramos cuántos GAO tenemos en Colombia, están el ELN, Clan del Golfo, diferentes grupos del Estado Mayor Central, de las Farc, los de Calarcá, los de Mordisco y varios más. Esto hace que haya un mercado grande y más con una frontera con Venezuela tan porosa, en donde es crítico tener control al 100 % porque tiene cuatro pasos regulares por Norte de Santander y más o menos 150 irregulares. Mientras tengamos a estos grupos delincuenciales sentados de ese lado y de este, siempre habrá un flujo de armas que va a llegar a las capitales.

SEMANA: Y entonces…

G. C.: Ahí la estrategia es caracterizar muy bien a los grupos y poder definir quién es el jefe de sicarios, quién es el jefe financiero, quién es el cabecilla o el que genera las órdenes de los componentes criminales. El mercado negro, claro que existe, y sí o sí, con la Dijín, tenemos que trabajar para caracterizar a quienes son los que están dinamizando el mercado de armas en Bogotá.

SEMANA: ¿Es Bogotá la principal plaza de grupos como el Tren de Aragua o Satanás o hay otra ciudad más?

G. C.: No, para el Tren de Aragua es Bogotá.

SEMANA: ¿Y cómo se abastecen de armas estos grupos?

G. C.: De Venezuela. La semana antepasada hubo una persecución fuerte en la que salieron heridos cuatro policías. Se capturó a la persona y era venezolana. Portaba una pistola Glock con más de 30 cartuchos y, cuando uno mira, se da cuenta de que son armas que provienen de otros lados.

SEMANA: ¿De cuántos venezolanos capturados estamos hablando?

G. C.: En 2024 se capturaron 4.227 venezolanos, la mitad por hurto y la otra mitad por tráfico de estupefacientes.

La explosión ocurrió en el barrio San Bernardo, del centro de Bogotá.
La explosión ocurrió en el barrio San Bernardo, del centro de Bogotá. | Foto: X: @leocaste22

SEMANA: El panorama de la seguridad en Bogotá es crítico. ¿Usted es optimista sobre el futuro en esa materia?

G. C.: Yo veo que se pueden hacer muchas cosas y veo que tenemos unas capacidades importantes. El jefe del servicio de Policía tiene la intención de seguirnos apoyando y darnos más pie de fuerza importante para poder seguir generando prevención y disuasión.

SEMANA: ¿Estamos bien de pie de fuerza?

G. C.: Recibimos 500 policías más que se suman a los 16.850 que tenemos en este momento. Siempre han dicho que es muy poco y más cuando la media internacional es de 300 uniformados por cada 100.000 habitantes; sin embargo, nosotros tenemos la media en 208, estamos por debajo en 92, pero eso se ha venido compensando desde la Dirección General y desde otras direcciones, entonces podemos llegar a ser cerca de unos 24.000. Lo más importante es focalizar, porque no se trata de poner un policía por ponerlo y tenemos que ser más efectivos en las capturas y en la focalización para poder optimizar los recursos que siempre van a ser limitados.

SEMANA: ¿Qué de lo que usted encontró en la metropolitana va a cambiar?

G. C.: Pienso que los procesos investigativos de los grupos. Ya nos sentamos y caracterizamos, por ejemplo, al Tren de Aragua. También generar más operativos para llegar a esos focos que no son tan recurrentes, pero que están en la ciudad. Allá tenemos que ir con megatomas y con capacidades diferenciales.

SEMANA: ¿Qué le pidió el alcalde Galán cuando usted llegó?

G. C.: Trabajar de la mano para sacar la ciudad adelante. Reducir el homicidio, sí o sí, atacar a los grupos delincuenciales y reducir el hurto.

Brigadier General Giovanni Cristancho
comandante de la Policía de Bogotá
Brigadier general Giovanni Cristancho, comandante de la Policía de Bogotá. | Foto: ESTEBAN VEGA LA-ROTTA / SEMANA

SEMANA: ¿Cómo está afectando el orden público del país a Bogotá?

C. G.: Nos hemos preparado con inteligencia y teniendo comunicación constante con el Ejército, el CTI, con la Policía y buscando fuentes humanas. Tenemos que seguir activando todos y cada uno de los espacios en los que se pueden enquistar los grupos armados organizados. Nos toca meterle mucho a la inteligencia. Si nosotros somos fuertes junto a la comunidad, estoy seguro de que con la institucionalidad podemos ganarles la carrera a los grupos delincuenciales.

SEMANA: ¿Bogotá camina segura?

C. G.: Sí, Bogotá camina segura en muchos lugares; quisiéramos que fuera en todos, pero es una ciudad de 8 millones de habitantes con una población flotante en el día de 2 millones más. En esta ciudad todos los días hay manifestaciones porque es una ciudad muy activa; los fines de semana es la ciudad con más eventos y la Policía tiene que brindar los servicios a todo eso. Nosotros quisiéramos tener un policía en cada esquina, pero aquí, mientras en un lugar alguien camina seguro, en otro punto seguramente no es así y ahí es donde debemos desplegar las capacidades.