Cómo evitar que los asistentes virtuales graben sus conversaciones sin permiso

Uno de los avances más significativos impulsados por la tecnología ha sido el desarrollo de los asistentes virtuales, herramientas clave en el día a día de las personas. Estos sistemas han facilitado la realización de tareas cotidianas de forma rápida y eficiente, lo que permite un ahorro considerable de tiempo y la posibilidad de concentrarse en actividades de mayor relevancia.

Disponible en teléfonos, computadores y demás dispositivos inteligentes, estos programas, alimentados por inteligencia artificial, optimizan procesos, gestionan tareas y mejoran la productividad. Uno de los principales beneficios de los asistentes virtuales es su disponibilidad continua, ya que, a diferencia de los seres humanos, no requieren descansos ni días libres. Esto les permite ofrecer soporte a cualquier hora del día, una característica especialmente útil para empresas que operan en diferentes zonas horarias o para usuarios que requieren asistencia fuera del horario laboral convencional.

Sin embargo, en torno a estas herramientas innovadoras han surgido inquietudes relacionadas con la seguridad y la privacidad, debido a que muchos de estos dispositivos y aplicaciones recopilan, procesan y almacenan información personal de los usuarios para brindar respuestas y servicios personalizados. El manejo de la privacidad en estos sistemas depende de diversos factores, tales como las políticas, las regulaciones de seguridad y las prácticas adoptadas por las empresas desarrolladoras.

A pesar de que los desarrolladores implementan medidas de protección de la información, una configuración incorrecta en los parámetros de privacidad puede representar riesgos significativos. Es responsabilidad del usuario asegurarse de que estos ajustes estén correctamente establecidos para prevenir vulnerabilidades.

Es fundamental entender que los asistentes virtuales operan mediante comandos de voz; es decir, se activan con palabras específicas para recibir las instrucciones del internauta. No obstante, en ocasiones pueden interpretar erróneamente la orden y comenzar a grabar sin que el usuario se percate. Estas grabaciones se utilizan para mejorar el servicio y ofrecer una experiencia más personalizada, pero es esencial revisar la configuración de privacidad y asegurarse de que se grabe solo lo necesario.

Para garantizar una experiencia más segura, se recomienda tomar en cuenta las siguientes acciones:

• Ajustar la configuración de privacidad: es crucial leer las políticas de privacidad y personalizar los ajustes de privacidad según las preferencias del usuario.
• Eliminar datos regularmente: se debe borrar el historial de interacciones o cualquier otro dato no deseado que se almacene.
• Habilitar alertas visuales o sonoras: algunos asistentes emiten un sonido o encienden una luz cuando están activos, lo que permite al usuario saber cuándo están escuchando.
• Desactivar la grabación de voz: la mayoría de los asistentes virtuales, como Alexa, Google Assistant y Siri, graban la voz del usuario cuando se activa un comando, como “Hey Siri” o “Ok Google”. Sin embargo, es posible desactivar esta función o limitar las grabaciones.

Finalmente, al configurar un asistente virtual, es importante revisar las políticas de privacidad y los términos de servicio. Los asistentes a menudo se actualizan y pueden incorporar nuevas opciones relacionadas con la privacidad, por lo que es recomendable mantenerse informado sobre cualquier cambio en este aspecto. En caso de que una opción de grabación resulte preocupante, el usuario puede optar por no permitir el almacenamiento de los datos.