Instalan nuevos dispositivos, además de cámaras, para controlar la velocidad en Bogotá; estos son los puntos donde quedaron

La seguridad vial es sumamente importante para cualquier administración, razón por la que a través de campañas y acciones puntuales los gobiernos locales buscan impactar este renglón, diseñando estrategias que lleven a disminuir los accidentes de tránsito y las muertes de cualquier actor vial.

En este sentido, la Secretaria de Movilidad de Bogotá, en el marco de la campaña ‘Bogotá, mi ciudad, mi casa’, ha identificado varias zonas de la capital donde se hizo necesaria una intervención para ayudar a controlar el exceso de velocidad y permitir que los peatones pueda caminar tranquilos, cruzar hacia sus colegios y lugares de destino y sentirse protegidos.

Se trata de resaltos parabólicos, que popularmente se conocen como ‘policías acostados’ y a través de los cuales la entidad capitalina está buscando que se respeten los límites de velocidad en la ciudad.

“Se trata de una medida efectiva de gestión de velocidad que nos ayuda a controlar el límite de velocidad en el que los conductores deben transitar por los principales corredores de la ciudad”, explicó la entidad.

Así mismo, aseguran que se trata de una opción “eficiente” que contribuye a la seguridad vial y que, a diferencia de otros dispositivos, no producen ruidos que afecten a las zonas aledañas, ni tampoco vibraciones que perjudiquen el ajuste de los vehículos, queja bastante habitual entre los conductores.

“Una vez instalados los resaltos parabólicos hay que esperar 28 días para poder tener pintura permanente, sin embargo, en este momento contamos con pintura preventiva y señales verticales que indican sobre la ubicación, velocidad del resalto para que no tomen por sorpresa a los conductores”, explicó la entidad sobre la forma como se instalan estos resaltos parabólicos.

¿Dónde se ubicaron los nuevos ‘policías acostados’?

En total son tres los puntos en los que se ha hecho especial énfasis; el primer es en la avenida Villavicencio, el segundo es la avenida Circunvalar y el tercero fue la avenida Guayacanes, la cual fue la primera en ser objeto de este y otros trabajos adelantados en apoyo con el instituto de Desarrollo Urbano IDU.

Para el caso de la Avenida Villavicencio, la intervención se llevó a cabo en el tramo comprendido entre las carreras 38 y 48; por el lado de la avenida Circunvalar, fueron dos las zonas donde se realizaron trabajos: en la carrera primera, entre las calles 23A y 23B; y entre las calles 26A y 26B.

“Te invitamos a conocer esta medida con la que, desde 2024, estamos interviniendo corredores críticos por siniestralidad vial en Bogotá y que nos ha demostrado ser muy efectiva para mitigar el exceso velocidad de carros y motos, haciendo posible una movilidad más segura”, explicó la Secretaría de Movilidad a través de sus redes sociales.

Cabe resaltar que este es un mecanismo que obliga a que los conductores reduzcan la velocidad, por lo que para que sea fácil de identificar se deben instalar señales de tránsito que adviertan a los pilotos sobre la presencia de este elemento en la vía, lo cual también hace parte de la estrategia implemntada por la entidad distrital.